miércoles, 9 de abril de 2008

Respuesta del Sr. Costa Colturi al "Centro de Estudios Gardelianos" de Buenos Aires


MONTEVIDEO - Semanario Búsqueda – Jueves 21 de Febrero de 2008

Cartas al director

Carlos Gardel

Señor Director:

Nuestra intención era finalizar la polémica que se mantiene sobre el origen de Carlos Gardel. Por dos motivos: uno, la saturación que el tema debe estar provocando en los lectores, y otro de importancia: valorar como corresponde la generosidad de esta página, que “búsqueda” ofrece a sus lectores.
Pero en el número de fecha 07.02.08, el Sr. Espina Rawson, en una nota nos invoca, y en consecuencia, si el Sr. Director nos permite, le contestaremos.

Muy brevemente el señor Espina nos solicita que presentemos y lo hagamos saber, la documentación que invocamos en nuestra entrega de fecha 27.12.07. En la misma dejábamos constancia que por respeto al espacio que nos otorga esta página, no los detallaríamos.
Sepa el señor Espina, que no somos estudiosos del tema, sí seguidores del mismo desde tiempo atrás, pero la voluminosa documentación que invocábamos no constituye un misterio y usted, sin ningún trabajo, la puede encontrar acudiendo, fundamentalmente, al libro del desaparecido Arq. Nelson Bayardo “Gardel a la luz de la historia”.
Pero entendemos y lo comprobamos que ustedes, los integrantes del “Centro de estudios Gardelianos de Buenos Aires”, sólo se afilian al “Gardel Francés”, ignorando los testimonios que existen de personajes de relieve, que no se pueden descalificar fácilmente. Evidentemente para ustedes los testimonios no existen.

Nada han contestado, concretamente, a las diversas entregas de corresponsales que han aportado datos y testimonios, como la señora Martina Iñiguez, en más de una oportunidad; o la nota del señor Mario Azzarini Scosería, de fecha 16.12.07, donde les hace 30 preguntas (¡¡¡ 30 preguntas!!!) sobre el tema, mereciendo de ustedes, hasta ahora, el más absoluto silencio…

Nosotros, en la nota del 27.12.07, les hacíamos tres preguntas. Solamente reiteramos la tercera, en donde precisábamos que el señor Esteban manifestó, en nota del 1.2.07 que Berta Gardes entre 1880 y 1893 no estuvo por estas latitudes. En la nota de referencia le informábamos al señor Esteban de su equivocación, puesto que la propia Berta Gardes, en reportaje aparecido en el diario “El Debate” de fecha 12.8.1935 manifiesta que en su juventud lo pasó parte, ora en Montevideo, ora en buenos Aires.

Este solo argumento es de una contundencia esclarecedora porque demuestra que Berta sí pudo haber sido la encargada de la crianza de Gardel. Ni el señor Esteban, ni el señor Espina, en la breve nota de contestación del 7.2.08 mencionan para nada ésto que aportamos de toda realidad, no inventado, y que al confirmarlo las declaraciones de la propia Berta Gardes, que estuvo en su juventud por estos lares, fractura la base de vuestra tesis del Gardel francés, que se elabora y se erige justamente en la negación de que la misma anduvo por el Río de la Plata en esa época…

Finalizamos manifestando que el “Centro de Estudios Gardelianos de Buenos Aires”, tiene el derecho de sostener la opinión que crea oportuna en cuanto al origen de Carlos Gardel, pero consideramos que al utilizar las páginas que “Búsqueda" dispone a sus lectores, tratando de polemizar sobre el tema pero en los hechos evadiendo todo análisis, evaluación y contestación de los distintos planteos de los corresponsales (puede que esa sea su manera de polemizar), realizados con altura, está en cierta forma como no teniendo en cuenta, la consideración que los lectores merecen.

Ricardo Costa Colturi